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Grave denuncia por falta de atención en el Hospital Granaderos a Caballo de San Lorenzo

  • Foto del escritor: Redacción
    Redacción
  • 7 mar
  • 3 Min. de lectura

Actualizado: 8 mar

Un pescador sufrió un accidente en el río y denuncia que pasó casi once horas sin recibir asistencia adecuada. Debió trasladarse por sus propios medios a otro hospital, donde finalmente fue intervenido quirúrgicamente. "Uno puede ir tranquilamente y morirse", expresó con indignación.

Un grave episodio de desatención médica se registró en el Hospital Granaderos a Caballo de San Lorenzo, donde un pescador local, identificado como Julio, pasó casi once horas sin recibir una respuesta adecuada a su emergencia. Tras sufrir un accidente en el río Paraná, donde un pez moncholo le clavó una aleta en el brazo, el hombre debió acudir al hospital, pero lejos de encontrar asistencia inmediata, se topó con demoras, negligencia y abandono.


Según informó el medio sanlorencino data365, el hecho ocurrió el viernes 28 de febrero, cuando Julio se encontraba pescando en el río y sufrió una lesión de gravedad. "Me juega una mala pasada el río, me pega un moncholo grande en la canoa, me salta y se me clava su aleta en el brazo", relató.


Ante la gravedad de la herida, se dirigió de inmediato al hospital de San Lorenzo, pero la atención fue sumamente deficiente. "Fui antes del mediodía y recién me atendieron como a las 3 de la tarde. Después tuve que esperar hasta pasadas las 9 de la noche para que me dieran algo y ni siquiera me dieron nada", denunció.


Según su testimonio, en el hospital no evaluaron correctamente la lesión y trataron de extraerle la aleta de manera improvisada, sin contemplar las consecuencias. "Me la tironearon, pero yo les dije que no, que no me la iban a sacar porque la flecha es serrucho, cuando sale rompe todo para atrás", explicó, evidenciando la falta de conocimiento del personal.


Ante la falta de respuestas y el dolor persistente, Julio decidió trasladarse por su cuenta al Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria. "Llamé un taxi, llegué, me atendieron y me hicieron pasar enseguida. Sacaron las placas, me desinfectaron, me dieron antibióticos, todo, y me dejaron internado hasta el otro día", afirmó.


Cirugía, internación y una larga recuperación

El contraste entre ambos hospitales fue notorio y alarmante. En Granadero Baigorria, al día siguiente, los médicos confirmaron la gravedad de la lesión y procedieron a realizar una cirugía para extraer la aleta, además de dejarlo internado hasta el 5 de marzo para su recuperación.


Sin embargo, las secuelas del accidente y la demora en su tratamiento fueron devastadoras para su trabajo. "Ahora quedo parado, sin trabajo y sin pesca también, porque la flecha me cortó los tendones de dos dedos y tengo una recuperación bastante grande", lamentó.


Duro reclamo al intendente de San Lorenzo

Indignado por la falta de recursos y atención en el hospital de su ciudad, Julio hizo un llamado directo a las autoridades locales. "Yo lo único que quiero decir es que se dedique a cuidar un poquito más el hospital y hacer menos placitas. No hay nada en el hospital, nada. Uno puede ir tranquilamente y morirse", sentenció.


El caso de Julio pone nuevamente en debate el estado del sistema de salud en San Lorenzo, donde la falta de personal, equipamiento y protocolos adecuados puede derivar en situaciones de riesgo para la vida de los pacientes.


Fuente: data365

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